Prepara Alejandro Fernández retorno a música vernácula

CIUDAD DE MÉXICO.- En su nueva canción, «Inexperto en Olvidarte», Alejandro Fernández deposita varios simbolismos que le calan hondo y lo llevan de la esperanza y la nostalgia a la tristeza y a la euforia.

Se trata de la primera canción de su próximo disco, el primero, también, del que no tuvo comentarios de su padre, el fallecido Vicente Fernández.

«Nos dolió en el alma (la partida de Vicente), éramos muy unidos, era el patriarcado, pero era la persona central. No porque ya no esté significa que no estemos unidos, pero nada es igual».

La pieza, que habla del perdón y la aceptación de los errores, marca su retorno al género vernáculo que lo encumbró en sus orígenes y con el que busca ampliar su audiencia.

«La partida de mi padre fue lo más doloroso; no es que dé gracias a Dios, pero ya no está en el hospital sufriendo, porque todos nos quebrábamos cuando lo veíamos así.

“En 2022) fue el nacimiento de (su nieta) Mía, la boda de Alex (Fernández, su hijo), el lanzamiento de otras colaboraciones, el disco nuevo. Normalmente de rutina era llegar a casa de mi papá para presentárselo, para que lo escuchara, me diera su consejo», lamentó «El Potrillo».

El 12 de diciembre se cumplió el primer aniversario luctuoso de «Chente», y el intérprete de «Me Hace Tanto Bien» aceptó que su familia sufrió mucho la pérdida, pero todos están resignados a continuar.

«Así es esto, es como un bimbalete de emociones. A veces estás arriba, pero a veces te dan unos bajones y con nostalgia. Llega el momento en que sólo piensas en los recuerdos chingones, los consejos».

«Inexperto en Olvidarte», que acaba de estrenar en plataformas y estaciones de radio, significa para Alejandro una forma de admitir sus sentimientos en una canción y de continuar.

En un fragmento de la pieza, compuesta por Amanda Coronel y Fernanda Díaz, dice: «…y el cabrón yo siempre fui», aceptando que cometió un error y le pide a su pareja que lo perdone.

«La canción va por ahí, reconoce que el güey es un cabrón, le pide una oportunidad para volver, arrastrándose, llegando, así pasa y pide una oportunidad». De 51 años, padre de cinco hijos y abuelo de dos niñas, el astro de la música ya grabó ocho piezas nuevas en Barcelona para el disco producido por Áureo Baqueiro, y en unas semanas más le pondrá voz a otras cinco.

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