CIUDAD DE MÉXICO.- Estados Unidos y México no llegaron a un acuerdo para reabrir la frontera de inmediato, pero el canciller mexicano, Marcelo Ebrard y el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas parecen apuntar a que la vacunación sea la base para que poco a poco “se vuelva a la normalidad”.

En un video en su página oficial de Twitter, Ebrard dijo que Mayorkas estuvo atento a las demandas de México, pero evitó dar una fecha para la reapertura de las fronteras.

Coincidimos en acelerar la vacunación para abrir las fronteras lo más pronto posible”, dijo Ebrard en su video.

El martes, llegaron a México 1.35 millones de dosis de la vacuna de Johnson & Johnson contra el coronavirus que fueron donadas por Estados Unidos. El cargamento se utilizará para vacunar a mayores de 18 años en cuatro ciudades que colindan con Estados Unidos: Tijuana, Mexicali, Ciudad Juárez y Reynosa. México ha dicho que su objetivo es incrementar las tasas de vacunación a niveles similares a los de las ciudades estadounidenses con las que comparten frontera.

El resto de las ciudades también recibirán vacunas de Johnson & Johnson para personas de 18 a 39 años, pero serán adquiridas por México.

Ebrard dijo que después de las vacunas no habrá argumentos de salud pública para mantener las fronteras cerradas.

Indicó en su cuenta de Twitter que le dijo a Mayorkas que México quería acelerar la vacunación para las personas que viven en la frontera con Estados Unidos para que la vida en esa parte del país regrese a la normalidad.

El secretario señaló que facilitar comercio, turismo y viajes es su prioridad”, escribió Ebrard.

Ambos entendemos las consecuencias económicas de las restricciones, no solo en las comunidades fronterizas de México, sino en la frontera de Estados Unidos”, declaró Mayorkas.

Ebrard nunca se refirió a que de abrirse las fronteras sólo se aceptarán vacunas de Pfizer, Moderna y Johnson & Johnson y se rechazarán las chinas o rusas.

De acuerdo al plan de Ebrard, la frontera podría reabrirse a finales de julio, una vez que se haya terminado con la vacunación de las personas de 18 a 39 años y se haya aplicado la segunda dosis a los adultos de 50 a 59 años.