Se despide Kiss con incendiario concierto

CIUDAD DE MÉXICO.- Tener el rostro pintado de blanco, la estrella estampada en un ojo y botas con plataformas era casi un ritual para presenciar el último show de KISS en México, en su gira mundial de despedida, en el Foro Pegaso.

Niños, jóvenes y adultos, ninguno de los 65 mil asistentes, cifra proporcionada por los organizadores, quería perderse la oportunidad de vivir esa experiencia. Y es que lo que ofrecieron la noche de este domingo en el Hell & Heaven Metal Fest, Gene Simmons, Paul Stanley, Tommy Thayer y Eric Singer fue una cátedra de historia del rock.

Enfundados en sus trajes brillantes, que los han vuelto íconos, y descendiendo los tres primeros desde las alturas sobre plataformas, «Detroit Rock City» les sirvió para presentarse ante un público rendido a sus pies.

Bienvenidos al paraíso. No hablo español muy bien pero comprendo tus sentimientos y mi corazón es tuyo, es verdad. ¡Viva México!», saludo Simmons, en español.

«Shout Out Loud» y «War Machine» sonaron y el eufórico público le entregó al grupo hasta su último alarido, al cierre de esta edición.

Previamente, los endiablados solos de guitarra de Megadeth fueron la clave para saciar a sus incondicionales.

La banda formada en California y liderada por Dave Mustaine premió con temas como «Hangar 18» y «Angry Again» a un público que desde horas antes de las 21:50 se aferraba a las vallas del Heaven Stage.

Muchísimas gracias, amamos estar en México, siempre son una gran audiencia», dijo el frontman del cuarteto, el cual, durante una hora y cuarto de presentación, detonó varias explosiones de fuegos pirotécnicos dignas de su estatus.

En el mismo entarimado, y con 41 años de trayectoria ininterrumpida, Anthrax prendió poco antes como en sus mejores días. La banda formada en Nueva York tomó el Heaven con energía y potencia.

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